Por: Gustavo González
Ante la situación política que vive el
sufrido pueblo paraguayo, no encontré mejor título para este artículo, ya que
en nuestra página de opinión de La República, nos ocupamos en aproximadamente
cinco oportunidades de la coyuntura del gobierno de Lugo y nuestro pronóstico
lamentablemente hoy puede constatarse.
El 27/12/09 decíamos en el artículo
(Paraguay, Solidaridad urgente):
“Pero la coyuntura actual de este hermano
país nos preocupa ya que existe un plan desembozado de desestabilización
impulsado por la burguesía nativa y el imperialismo, esto último a no dudarlo.
Los gringos vieron en el ensayo de Honduras una nueva modalidad golpista y sin
dudas puede ser Paraguay el próximo escenario.
Una izquierda débil, un movimiento popular
fragmentado y con poca experiencia política, una derecha recalcitrante
históricamente golpista.
Sumemos a ello que Lugo no tiene mayorías
parlamentarias y que además toda la institucionalidad estatal está en manos de
viejos caudillos y funcionarios del Partido Colorado.”
El lector podrá observar en el párrafo que
seleccioné de diferentes artículos que desde el año 2009, anticipábamos que el
proceso, de no mediar cambios, seguramente desembocaría en este triste y
lamentable final.
Imagen: http://facundohisi.blogspot.com
Pero de nada serviría el análisis si no
intentamos que nos deje enseñanzas políticas claras. El imperialismo y sus
colaboradores nacionales imponen hoy con gran similitud el experimento
Hondureño en otro país de nuestro Continente; le tocó a Paraguay esta vez.
Lugo y su propuesta nos señala varias
cuestiones: la primera y fundamental es que la burguesía, los partidos que la
representan y el imperialismo, no perdonan; es inviable todo tipo de
negociación que rebaje el programa político de cualquier fuerza que diga
defender a su pueblo.
Bueno es decir además que evidentemente la
inocencia política de creer en la colaboración de clases, solo deja como
resultado el triunfo de los de arriba, más temprano que tarde. La historia se
encargó ya de demostrar lo que aquí digo y con un saldo no solo de derrotas
sino con muertos y represión salvaje.
El pretexto que la prensa internacional
está poniendo como argumento del Parlamento más corrupto del Continente, como
lo es el paraguayo, para dar este “golpe técnico”, pareciera ser el
enfrentamiento entre campesinos y fuerzas represivas.
En realidad hay mucho por ver aún acerca de
la verdad de los hechos, pero sí considero que la tardanza extrema de Lugo en
impulsar la promesa electoral de “reforma agraria”, en un país esquilmado por
los grandes hacendados sojeros, donde el hambre campea en las familias campesinas,
hizo temer a los dueños de la tierra que la polarización de los enfrentamientos
siguiera, frente al hartazgo de los campesinos en la espera de promesas no
cumplidas. Porque en varias zonas rurales existe realmente hambre, no se
garantiza ni la mínima seguridad alimentaria.
Oponerse al “golpe técnico” o “express”
como gustan llamarle ahora, es fundamental. Recomponer las fuerzas populares de
Paraguay en un camino de lucha contra la dictadura de Franco; es la tarea que
se impone.
Pero también deberá el movimiento popular
de este país hacer un profundo balance para encarar la pelea con una estrategia
de victoria.
Respecto a nuestros países hermanos, espero
no cometamos el mismo error que se está cometiendo con Honduras, dejándolo solo
en su lucha. Hoy nuevamente la solidaridad internacional será determinante para
frenar la escalada golpista que se cierne sobre nuestros países. Hoy no nos
podemos permitir debilidades, como se hizo con el gobierno golpista de Lobo,
como, a título de ejemplo, se le levantaron los bloqueos que en primera
instancia se habían prometido.
Se impone toda nuestra solidaridad con el
pueblo paraguayo y hondureño, dos caras de una misma moneda.
Tomado de: http://www.diariolarepublica.net
No hay comentarios:
Publicar un comentario