Rocky Montana
Foto: http://blogs.windsorstar.com
Rocky Campana intentó suicidarse, lo que le dejó en un
estado vegetativo, hasta que el pasado agosto pasado se le desconectó de la
máquina que le sostenía con vida. Desde entonces, sus padres, Rob y Nancy
comenzaron a luchar porque los órganos de una persona joven como él se
aceptaran para que otra persona que los necesitara pudiera salvarse, ya que,
desde 2007, en Canadá se consideran de “alto riesgo” aquellos que procedan de
personas gays sexualmente activas.
Su madre aún recuerda la conversación con los responsables
de trasplantes de Ontario: “Me preguntaron si era gay, y yo les respondí que
‘sí’. Y después me inquirieron si era sexualmente activo o si tenía pareja y yo
volví a responder que ‘sí’ .
Cuando colgué el teléfono para transmitir la
decisión -sus órganos no serían utilizados-tanto a Rob como un montón de amigos
de Rocky rompieron a llorar”, según informa CBC News.
El sistema sanitario de Canadá decidió hace unos seis años
introducir a los homosexuales activos sexualmente en el mismo grupo que los
usuarios de drogas inyectables y otros grupos de alto riesgo.
Según la CBA, la política de Salud de Canadá dice que “un
hombre gay que haya practicado la abstinencia durante los cinco años previos a la
donación de órganos sería considerado un donante aceptable, pero un hombre
heterosexual que haya tenido un solo encuentro sexual con un hombre dentro de
la últimos cinco años no sería considerado apto”.
Para justificar tal decisión, ahora un portavoz del sistema
sanitario asegura que encontraron restos de pequeñas cantidades de droga en su
organismo, lo que Nancy ve poco probable: “De acuerdo con la legislación de
Salud de Canadá, un hombre o una mujer que es gay caería en la categoría de
alto riesgo, pero solo ese hecho no le impide ser un donante“, aseguran desde
el organismo
La petición de la familia Campana, que será enviada a la
Cámara de los Comunes, tiene como objetivo cambiar las normas sanitarias
canadienses, para que dejen de considerar a los homosexuales como personas de
alto riesgo. No son pocos los países que consideran que las personas que
se acuestan con otras de su mismo sexo no son aptas siquiera para donar sangre.
Tomado de: http://www.ociogay.com
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