Primos, homosexuales y fervientes musulmanes

Imagen: http://madikazemi.blogspot.com

Iman Usman ama el mes sagrado islámico de Ramadán, que comenzó el pasado 8 de julio. “Es, literalmente, mi mes favorito”, explica la joven de 18 años de edad. “Te levantas temprano por la mañana con tu familia a orar. Hay que levantarse antes de que el sol se salga”, relata en el portal kpbs.

Su primo Salman, como hombre gay con pareja de mucho tiempo, más que su apoyo, es su protector: “Yo sólo le recordé que ella sigue siendo una jovencita, y sigue siendo una joven musulmán y tiene que actuar en consecuencia”, dice Salman, que sabe que la homosexualidad de su prima puede no entenderse con sus creencias. Él pasó por lo mismo, por lo que sabe perfectamente de lo que habla.

No hay por qué romper los lazos familiares por el Islam. Salman aseguran que sus padres toleran la sexualidad de él y su prima. Pero nunca hablan sobre el hecho de que él es gay y ella lesbiana. “Ellos reiteraron que nos aman y nos aceptan, pero no aceptan mi relación y no aceptan algunos de mis comportamientos”, avisa. Y es que para llegar a la tolerancia absoluta aún queda mucho por recorrer, aunque no todos tienen la suerte de Salman e Iman.

Munir Shaikh, profesor de Estudios Musulmanes en Bayan Claremont, dice que esto es una respuesta común a la homosexualidad dentro del Islam. La homosexualidad es considerada pecaminosa. 

Pero Shaikh aclara que dentro de una gran cantidad de mezquitas tradicionales, se suaviza el mensaje desde el púlpito. “Es sobre todo el odiar el pecado, pero amar al pecador”, señala.

Tomado de: http://www.ociogay.com