El mundo se abre sin remedio a los derechos LGTB. Y, en
especial, Israel, que además de no salir tan mal parado como otros estados en
el índice de la aceptación de la homosexualidad, no deja de tomar medidas
encaminadas a la igualdad absoluta, según informa el portal Haaretz.
La última de ellas es que todos los prisioneros homosexuales
del país tendrán un derecho hasta hace poco vetado para ellos: podrán recibir
visitas conyugales sin restricciones. Por fin, los reclusos israelíes gays
tendrán la misma oportunidad de ver a sus parejas que los heterosexuales.
La decisión de ofrecer las mismas oportunidades al sector
homosexual que al resto de reclusos llega después de que en primera instancia
el Servicio de Prisiones de Israel declarase de manera explícita que los gays
no podían recibir visitas de sus parejas. Algo que, por suerte, ha cambiado.
Tomado de: http://www.ociogay.com
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