Comienza la controversia en Praga. Después de que la capital checa anunciara la realización de su primer Gay Parade, un consejero del presidente de ese país, Petr Hájek, condenó la iniciativa y afirmó que "es algo grave que va en contra de los valores tradicionales del pueblo checo".
En el sitio web del parlamento de la República Checa, Hájek declaró que el mundo de los homosexuales es un mundo en el que la familia no juega ningún rol. "Es un mundo en el que las desviaciones sexuales son elevadas al rango de virtud, la anormalidad al rango de la norma y la destrucción de la sociedad al rango del santo progreso".
El político agregó que los homosexuales son ciudadanos desviados y que "el hombre blanco, heterosexual y cristiano es una especie en peligro de extinción en los países que reivindican las manifestaciones homosexuales".
Para finalizar, Hájek atacó directamente al alcalde de Praga, Bohuslav Svoboda, por apoyar la realización del Gay Parade, y pidió que lo destituyan de sus funciones.
Tomado de: http://zonadiversa.blogspot.com
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