Foto: http://hokrenew.com
El Departamento de la Policía Metropolitana
de Washington D.C tuvo que desalojar la semana pasada el edificio de la Human
Rights Campaign, del National Gay and Lesbians Task Force, y de otras
organizaciones que trabajan a favor del reconocimiento de los derechos de la
diversidad sexual.
El desalojo se llevó a cabo después de que
las autoridades estadounidenses recibieran un aviso de bomba, motivo por el que
se procedió a desalojar a todos los miembros de las organizaciones presentes en
el edificio para evitar que el estallido de la misma conllevara la pérdida de
vidas humanas.
Sin embargo, tras la inspección por parte
de la policía, se comprobó que no se había colocado ninguna bomba en el
edificio, por lo que los activistas pudieron volver a sus actividades dentro de
las instalaciones previamente desalojadas.
Pese a que finalmente no existiera la bomba
de la que se había avisado a la policía, las organizaciones defensoras de la
comunidad LGTB ven el caso como un aviso por parte de colectivos homófobos para
amedrentar la lucha por el reconocimiento de los derechos de la diversidad
sexual en un momento en el que organizaciones LGTB se están enfrentando a
colectivos de ultra-derecha que pretenden impedir el avance del matrimonio
igualitario en Estados Unidos.
Tomado de: http://noticias.universogay.com
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